domingo, 27 de septiembre de 2009

NEGRE DE ALONSO Y ADOLFO RODRÍGUEZ SAÁ: LOS NUEVOS "SOLDADOS" DE DIOS...
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Con todo el cargamento ideológico del sector más ortodoxo de la Iglesia Católica, la senadora nacional y militante del Opus Dei, Liliana Negre de Alonso, aseguró que todas las leyes referidas a los derechos sexuales que se aprobaron en el Parlamento en los últimos años fueron por culpa de la ampliación del cupo femenino en la Cámara Alta. “Esto antes no sucedía”, se lamentó la legisladora y agregó: “en el Senado floreció el veneno de la cultura de la muerte”, dijo ayer ante unos cincuenta alumnos de la Universidad Católica de Cuyo en una conferencia sobre Bioética que se desarrollo en el Hotel Amerian.
Mientras Negre de Alonso hacia esto Adolfo Rodríguez Saá cotejó en la universidad Católica en San Luis para ganar una cátedra sobre derecho rural y un tribunal lo recomendó con elogios.
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La extraña democracia de Sor Liliana
Con todo el cargamento ideológico del sector más ortodoxo de la Iglesia Católica, la senadora nacional y militante del Opus Dei, Liliana Negre de Alonso, aseguró que todas las leyes referidas a los derechos sexuales que se aprobaron en el Parlamento en los últimos años fueron por culpa de la ampliación del cupo femenino en la Cámara Alta. “Esto antes no sucedía”, se lamentó la legisladora y agregó: “en el Senado floreció el veneno de la cultura de la muerte”, dijo ayer ante unos cincuenta alumnos de la Universidad Católica de Cuyo en una conferencia sobre Bioética que se desarrollo en el Hotel Amerian.

La bronca de la representante puntana se debe a que desde el 2001 –año en el que ingresaron 25 mujeres al Poder Legislativo-, el Congreso sancionó una batería de leyes de por más reacias al conservadurismo católico del que Negre forma parte, como por ejemplo la Ley de Salud Reproductiva. La norma, promulgada en el 2002, autoriza la prescripción de métodos anticonceptivos en forma gratuita a los sectores de bajos recursos económicos y habilita a los médicos a recetarlos, soóo sino son abortivos.

Otro cambio que se incluyó dentro de los derechos de salud sexual de las personas fue facultar a todo ciudadano mayor de edad a acceder a intervenciones quirúrgicas anti concepcionales, como la ligadura de trompas de Falopio y la vasectomía, en cualquier hospital público o privado. La disposición, bautizada como “Régimen para las intervenciones de contracepción quirúrgica”, fue proclamada en el 2006.

“Esas leyes las aplicaba Fujimori para que no se reprodujeran las pobres peruanas”, exclamó la senadora ante la atónita mirada de los estudiantes, a quienes recomendó que se introdujeran en la función pública para defender el derecho a la vida. “Hay que capacitarse y saber legislar, la política no es corrupta, los políticos la hacen corrupta”, se sinceró Negre a quien es muy común escucharla decir “los de izquierda”, cuando se refiere a los senadores que simpatizan con la gestión kirchnerista.

La funcionaria nacional tampoco ahorró críticas cuando hizo referencia a la Ley de Educación Sexual. La norma, aplicada en el 2006, es resistida por todo el poder eclesiástico, desde donde reclaman que se incluya a la familia en la confección de los contenidos de la materia. “La ley dice que los padres no deben conocer el contenido. También dice que nacemos sin sexo, o que nacemos con cinco sexos, por favor, que no nos digan que es lo mismo nacer lesbiana u homosexual. Yo la vote en contra y salí tapa en Página 12”, disparó.

Un año antes, Negre también fue protagonista en una nota de ese matutino porteño cuando presentó su libro “El divorcio es el cáncer de la sociedad”. El escrito pretendía impulsar las “Bases políticas familiares en la Argentina”, según dice la publicación. De la reunión literaria participaron destacados representantes de la derecha argentina: el ex presidente de la Nación Adolfo Rodríguez Saá, el senador por Tucumán Ricardo Bussi, hijo del represor militar, y el macrista Santiago de Estrada, ex funcionario de la dictadura, entre otras personalidades.

La jueza Argibay, poco más que el demonio

La disertación de Negre –antes había oficiado de orador Jorge Scala, un abogado que sostiene que la ideología de género deforma la raza humana-, culminó con palos verbales a la jueza de la Corte Suprema de Justicia Carmen Argibay, por su apoyo a la legalización del aborto. “La jueza es abortista y apoya a las lesbianas que pusieron un 0800 para aconsejar sobre las técnicas anticonceptivas, no puede ser”, tiró la senadora.

Sin embargo, la senadora no dijo nada sobre la cantidad de embarazos no planificados en el país, principalmente en las zonas más marginales. Según un estudio del Centro Latinoamericano Salud y Mujer (Celsam), “más de 100.000 hijos de madres adolescentes nacen por año en Argentina”, asegura el informe. El desconocimiento de los métodos anticonceptivos, la falta de información sobre la sexualidad y el cuidado del cuerpo son las causas que lleva a muchos jóvenes a atravesar un embarazo no deseado.

“La primera necesidad es la educación para poder tomar una decisión con conocimiento. Las mujeres deben conocer todos los métodos”, dijo la magistrada en declaraciones a la prensa y además reclamó la implementación de la educación sexual "en todas las escuelas” e instó a “sancionar” a quienes no cumplan con la legislación.

Tales conceptos pusieron de los pelos a Negre. “Tenemos que participar en la función pública para que podamos defender el derecho a la vida. Tenemos que prepararnos porque los defensores de la muerte saben como operar. Los otros días iba camino al Senado en un taxi y escuche a Víctor Hugo Morales decir un montón de cosas a las que yo disentía y por eso cuando llegué a mi despacho le mandé un mail. Así hay que hacer, involucrarse”, aseveró la funcionaria, mientras que Scala la remató con “Morales no puede opinar porque es uruguayo”.
http://www.cronicadesanluis.com.ar/cronica/index.php?option=com_content&view=article&id=1874%3Ala-extrana-democracia-de-sor-liliana&catid=36%3Apolitica&Itemid=79&lang=es
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RELACIÓN AMIGABLE ENTRE LA UNIVERSIDAD CATÓLICA Y LOS RODRÍGUEZ SAÁ
Con desparpajo no pocos católicos y sectores laicos ven como se han ido estrechando las relaciones en los últimos tiempos de los hermanos Rodríguez Saá, o más que ellos, sus intereses, con la muy católica Universidad que tiene sede en el Bajo Chico.
Resulta que en sus aulas y conducción no solo hay importantes personajes ligados con el oficialismo provincial, sino que hasta el propio Adolfo cotejó para ganar una cátedra sobre derecho rural y un tribunal lo recomendó con elogios.
La última es mucho peor. Mientras la Iglesia nacional -a través del obispo Casaretto por ejemplo-, lanza sapos y culebras sobre el demonio del juego, la Universidad Católica cierra acuerdos con el gran centro de juego y timba de los Hermanos en La Punta y manda a sus estudiantes de turismo a realizar pasantías en el hotel Arenas de allí donde, se recordará, los pingos tienen más comodidas que la mayoría de los barrios de San Luis.
No son los únicos acuerdos y también hay estudiantes pasantes en los hoteles Vista y Quintana.
Como se ve, una relación más que amigable. ¿No sería conveniente que el Sr. Obispo se expresara sobre estos temas?
¿O será que no tiene poder sobre la Universidad Católica?
en domingo, septiembre 13, 2009 0 dia dos uno
creado Diario El Popular de San Luis