lunes, 7 de enero de 2008

EDUCACION EN SAN LUIS: LAS ESCUELAS AUTOGESTIONADAS DE LOS RODRIGUEZ SAÁ
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El feudo de Puntania fue el primero en implementar las reformas educativas del Menenísmo. No se quedaron allí sino que implementaron el sistema de escuelas chárter copiado del sistema norteamericano, las escuelas autogestionadas y experimentales.
Hoy luego del fracaso del modelo educativo de los 90 -celebrado por el feudo- la historia no parece haber cambiado mucho, el sistema de escuelas publicas experimentales, controladas por una asociación particular, sigue manteniendo a docentes en precariedad laboral y priorizando la educación como un servicio más que como un derecho.
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ASDE Duro comunicado por despidos en escuela desconcentrada
La agremiación ASDE, que nuclea a los docentes de Villa Mercedes y zona de influencia, emitió un duro comunicado de prensa, debido a que “en la escuela EPED (Escuela Pública Experimental Desconcentrada), Número 2 del Barrio "La Ribera", en la ciudad de Villa Mercedes, por voluntad propia de los Directivos de ésta "ESCUELA AUTOGESTIONADA" DE NUESTRA PROVINCIA, fueron despedidos CATORCE DOCENTES, profesionales, sin mediación de causa alguna, y por tal motivo señalan que:
“La modalidad de escuela de autogestión implementada y sostenida por el Gobierno Provincial de San Luis, es un artilugio más para privatizar la educación.
Esta nueva manera de financiar la oferta y la demanda en las escuelas solo ha generado clientelismo político (directivos amigos del poder central y no necesariamente docentes), precarización de las condiciones laborales del conjunto de los docentes, incrementar la brecha de desigualdad educativa, deterioro de los aprendizajes de los alumnos, un elevado autoritarismo político tanto del gobierno como de sus directivos a la hora de introducir la desregularización de los contratos docentes porque donde existe inestabilidad laboral hay posibilidades de disciplinar socialmente al docente, no hay lugar para el pensamiento autónomo sino para domesticarlo por las guías, de limitarlo en la aventura de crear y privado de su responsabilidad polìtica con la educación.
No se les paga antigüedad (rubro significativo en la docencia), no se les respeta turno ni carga horaria y tampoco se garantiza calidad educativa porque quienes ejercen como docentes pueden muy bien no serlo pues no entran por junta de clasificación (de hecho muchos no lo son, aunque los despedidos sí lo sean).
Esta modalidad, extendida en San Luis y muy resistida por los docentes, es alentada por el gobierno provincial, sostenida con sus fondos y llevada adelante por sus amigos.
Generalmente se enclavan en barrios populosos y alejados por lo que tienen mucha matrícula.
Ello es así no porque sean hermosas sino porque el costo de transporte para llegar a otras escuelas constituye una carga muy pesada en el presupuesto familiar.
En cuanto a los docentes que sí tienen título son concientes de su precariedad laboral y de la coacción a sus libertades pero sencillamente necesitan trabajar.
Generalmente estas escuelas "clasistas": cuentan con una elevada matrícula ya que se enclavan en barrios populosos, alejados y muchas veces de padres con escasos recursos por lo tanto el costo del transporte para enviar sus hijos a otras escuelas constituye una carga muy pesada.
Este tipo de escuelas-engendros forman un sistema perverso y humillante-, constituyen un avance más sobre la escuela pública de gestión estatal y son tristemente significativas en cuanto desobedecen el mandato constitucional que señala a la educación como una obligación indelegable del estado y un derecho social. De hecho el estado delega su responsabilidad en gente que no necesariamente es idónea y la escuela es concebida como una empresa que presta un "servicio" (no que asegura un derecho) a cambio de un rédito.
En pocas palabras la escuela es vista como un negocio y los docentes como operarios cuyo primer requisito es la más absoluta obediencia.
"Aunque la esclavitud sea consentida es esclavitud".
Una situación terrible, una injusticia legal avalada por el estado, una vergüenza para todos los docentes y un terrible sangrado para la escuela pública de gestión estatal que todosconocemos y que se ataca sistemáticamente.
A los docentes despedidos, ¡Fuerza! A los demás, fuerza y organización.
Este tipo de escuelas debe desaparecer porque son una incoherencia dentro de un sistema
democrático. Lamentablemente en San Luis avanzan”
Informe: Carlos Rubén Capellacarlosrcapella@yahoo.com.ar
http://periodistasenlared.info/enero08-07/nota7.html
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Fuerte caída en el número de alumnos secundarios En ocho provincias hay 141.544 inscriptos menos
La obligatoriedad del secundario, una de las metas fijadas en la nueva ley nacional de educación, ya tiene un obstáculo que costará superar: ocho provincias registran una fuerta caída de 141.544 alumnos, entre 2002 y 2006.
La mayoría de ellos –113.613– pertenece a la provincia de Buenos Aires, que perdió una cifra equivalente al 10,3% de sus estudiantes secundarios.
Así lo refleja un reciente informe del Ministerio de Educación, que advierte sobre un descenso preocupante en ese decisivo nivel de enseñanza.
Si bien esta drástica disminución se compensa con otras 16 provincias que después de la crisis económica de 2001 aumentaron su población estudiantil, en el nivel nacional también el saldo es negativo: en las escuelas secundarias hay 69.302 inscriptos menos; la matrícula bajó de 2,79 millones de alumnos a 2,72 millones. (...)
El informe revela también una caída en el número de egresados.
La más fuerte se registra en la provincia de Buenos Aires, que pasó de 129.445 graduados en 2002 a 90.590 en 2006. Le siguen la ciudad de Buenos Aires (de 26.277 a 21.792), Córdoba (de 23.396 a 19.516), San Juan (de 4429 a 3816), San Luis (de 3032 a 2292) y Santa Fe (de 23.276 a 19.730).
En otras provincias, en cambio, la tendencia es fluctuante: en Corrientes, pasaron de 7562 alumnos en 2002 a 5296 en 2005 y a 6880 un año más tarde; en Catamarca, de 2894 en 2002 a 3759 en 2004 y a 3001 en 2006, y en Salta, de 9.490 en 2002 a 11.185 dos años más tarde y nuevamente baja a 9481 en 2006.
Por Nathalie Kantt De la Redacción de LA NACION http://www.lanacion.com.ar/EdicionImpresa/cultura/nota.asp?nota_id=976812