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Este martes el feudal de Puntania inauguró las sesiones legislativas 2008 con un discurso donde repitió que va hacer obras que ya ha venido anunciando otros años. Se olvido de mencionar el tema del conflicto docente, no admitió su fracaso en seguridad, ni en transporte -se acuerdan del plan maestro en el discurso del año pasado-. A la justica le prometió algún edificio nuevo pero no dijo nada sobre la cobertura de cargos vacantes.
En fín lo mismo de siempre pero este año mas buenito y con duración de discurso al estilo chavista... Al final se olvido de mencionar a su hermano Adolfo como siempre en los otros discursos lo hacía, mientras que muchos de los asistenctes se preguntaban por la asusencia del efímero ex-presidente...
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1º de abril
Rodriguez Saá abrió el periódo de sesiones ordinarias
. Con un discurso que se prolongó por más de tres horas, el gobernador de San Luis dejó inaugurado el CXXXII período de sesiones ordinarias -XXI bicameral- e hizo una rendición de su obra de gobierno en 2007 y "de como recibí las cuentas de la gestión anterior", refiriéndose a la suya propia.
Repitiendo una serie de anuncios que había pronunciado en la apertura de 2007, en esta oportunidad anticipó la realización de obras en el marco del bicentenario de la declaración de la independencia y anunció la construcción de un centro gubernamental en cercanías del dique chico, por un valor de 256 millones de pesos, que tendrá como eje una pirámide de acero, vidrio y piedra.La asamblea legislativa fue calificada como "histórica" por el mandatario ya que no solo se mantuvieron en sus bancas los diputados del kirchnerista Frente Juntos por San Luis, sino que también estuvo presente el senador Daniel Pérsico, con quien mantuvo una dura disputa mientras era intendente de la ciudad de San Luis y coexistían los dos municipios. "Quiero agradecer este gesto a la oposición", dijo Rodríguez Saá, ya que también se encontraban los principales referentes de los partidos opositores, como Walter Ceballos, presidente de la UCR a quienes se acercó a saludar cuando se dio por finalizada la sesión.
En ese sentido destacó un párrafo importante para reiterar el llamado al diálogo político, entre "los hermanos puntanos" . Dijo que la constitución de 1987había sido un "tratado de paz" entre el peronismo y el radicalismo, pero que ahora era necesario hacer una modificación inteligente del sistema político. "Saquemos del escenario a los duros, a los apasionados, busquémosle la vuelta al diálogo" para trabajar como "hermanos puntanos", dijo el mandatario.Los principales anuncios fueron realizados en materia de obra pública y anticipó que se estaba trabajando en un plan maestro del agua, con una previsión para los próximos cuarenta años, en los que se construirían 17 presas en las sierras de San Luis, con un costo de unos tres mil cien millones de pesos.
Aunque aclaró que todo el mundo pagaría el agua en la medida en que la use, incluso los pobres que deberian abonar aunque más no fuese "un valor simbólico". El dinero para las presas que son necesarias construir -según los estudios a los que se refirió- debería salir del pago del agua que hicieran los consumidores. En materia tecnológica hizo saber que al finalizar su mandato toda la provincia tendrá servicio de internet inalámbrico de banda ancha a traves del Wi Fi y que este año se comenzaría con un plan piloto para cubrir pequeñas y medianas localidades de la provincia. "A partir del mediodía de hoy, sobre la calle Rivadavia entre la Plaza Pringles y la Plaza Independencia (la más céntrica de las arterias de la capital) está funcionando el servicio de Wi Fi", señaló, como la primera de las pruebas que quedará en marcha y servirá como experiencia piloto para el desarrollo.
Esta vez no se refirió a lo que anunció dos veces en las aperturas anteriores y finalmente nunca se puso en marcha: el denominado "triple play" que se brindaría a través de la autopista de la información, que hasta hoy es un proyecto frustrado de su gobierno y particularmente de la ULP.Rodríguez saá se mantuvo muy cauto con el enfrentamiento que mantiene con el gobierno nacional y en una sola oportunidad, cuando hacía referenicia a una ley que enviará a la Legislatura provincial, se refirió al crecimiento de la Argentina, "que no es porque tengamos un buen gobierno, sino porque todos los países emergentes están creciendo", señaló.En relación a las políticas de campo se preveía un discurso más duro hacia la presidenta Fernández de Kirchner, ya que los principales referentes del campo ocupaban un sitial preferencial dentro del recinto y, si bien cuestionó las políticas de las retenciones, se limitó a ofrecer sus buenos oficios para que el conflicto entre el campo y el gobierno se superen. "En la campaña yo decía que había que sacarle las manos al campo", subrayó.Dijo que iba llamar a un foro federal de gobernadores para "que ayudemos a la solución del conflicto", aunque reconoció sonriente que "se que no son muchos los que quieren hablar conmigo".No obstante, volvió a decir que el gobierno de San Luis presentaría una demanda ante la Corte Suprema de Justicia para reclamar sobre la falta de coparticipación de las retenciones a las provincias. "Con las retenciones el gobierno no cobra el impuesto a las Ganancias, que es coparticipable", explicó y de esa manera, la provincia de San Luis estaría enviando fondos extras a la Nación por un monto de "cuatrocientos millones de pesos"."La presidenta tiene que escuchar a los gobernadores, tiene que tener las puertas abiertas", sostuvo y volvió a remarcar como lo había hecho años anteriores que "la Casa Rosada no está abierta para la provincia de San Luis".Rodríguez Saá anticipó que enviará a la Legislatura un proyecto que se avizora como polémico, el de la Ley de Objetores de Conciencia, que hará que aquel que por un problema de conciencia decida no obedecer una ley, tenga un tribunal para recurrir y tomó como ejemplo al de las comunidades originarias que no quieran adoptar el festejo del 12 de octubre que se rige por una ley. Este tribunal tendrá una conformación especial y luego de su fallo se podrá recurrir "por la vía del amparo" para hacer efectiva la negativa.También anunció que destinará 80 millones de pesos más al Poder Judicial a fin de construir edificios administrativos en distintos puntos de la provincia y que, escalonadamente desde el año venidero, se irá sumando un porcentaje al presupuesto destinado a la Justicia para que del 2,3 % que actualmente tiene llegue a poco más del 4% a fin de su mandato.
En el ámbito de la justicia señaló que proponía una reforma al sistema judicial, y deslizó que una de las propuestas que llevaría adelante sería la creación de una Secretaría Tributaria y una modificación de los códigos de procedimientos. "Venimos a coordinar con los otros poderes para hacerlo entre todos", se atajó, quizá recordando las críticas recibidas el año pasado cuando se refirió a la asamblea, donde también estaban invitados los miembros del STJ, como "una reunión de gabinete ampliada".También dentro del plan de obras anunció la creación de un centro administrativo provincial a la vera del Río Seco -rebautizado Rio San Luis por Rodríguez Saá- en cercanías del dique chico, ubicado en el extremo sudeste de la ciudad, donde se invertirán 256 millones en un plazo de cuatro años y entre las obras que se realizarán estará la oficina del gobernador que será una pirámide hecha en vidrio, acero y piedra.
El capítulo mas corto de su mensaje fue el destinado a la educación, en el que anunció un programa de capacitación, que por supuesto, hará la ULP.
"Todo el mundo deberá pagar el agua"
http://www.periodistasenlared.com.ar/abril08-03/nota2.html
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Apostillas de la sesión
Acerca del diálogo político: ¿ni vencedores ni vencidos?
Rodríguez Saá no habló el martes para quienes estaban presentes en la sesión, ni para el actual pueblo de la provincia de San Luis, habló imaginándose en el bronce, más allá de todo y de todos. La oposición le dio el marco adecuado con su presencia.
Ni vencedores ni vencidos, dijo sin decirlo. "Quiero ser recordado como un hombre bueno", sentenció ya casi como una frase para la posteridad, luego de nombrar a otros dos "hombres buenos" que lo precedieron hace algún tiempo en el cargo.
Por momentos dejaba entrever cieto hartazgo por esa ceremonia donde debia rendir cuentas y anunciar cuáles serían sus próximos "sueños".
Habló del sueño de crear un nuevo municipio en donde él tiene su fundo. Tres caseríos, localidades, pueblos o como quiera llamárseles, unidos en uno. El sueño fundante, el de los reyes, creador de pueblos. No dijo como se llamará el municipio que reunirá a Estancia Grande, El Durazno y Virorco, pero se llamará Estancia Grande, porque lo deslizó de manera subliminal, dejando para la "comisión" que estudie el tema el nombre del nuevo conglomerado. Hay un problema para esta creación, que uno de ellos está en el departamento Capital y los otros dos en Coronel Pringles. Pero hay que "revisar los límites" y seguro aparace el "algarrobo y el aguaribay" corridos para el lado conveniente.
Con delicadeza para que no parecer un recaudador compulsivo, contó de los mecanismos que pondrá en marcha para que nadie se vaya sin pagar, ni un solo centavo. Lo acentuó cuando contó del convenio que firmó con la ciudad de Buenos Aires para hacer auditorías en la más grande de las urbes para que nadie deje de tributar. "Nuestro éxito" se debe, también a que San Luis es muy buena recaudando, dijo.
Ya desde el pedestal, desde el bronce mismo, habló de obras a cuarenta años. Ya no estaba allí cuando anunció los diques que se debían construir preparándonos para la próxima guerra del agua. Se alejó de todos, incluso de los aplaudidores compulsivos de su partido que debieron ahogar el golpetear de manos cuando empezó a hablar del Plan de Inclusión y esta vez fue para criticarlo.
La oposición lo sacó del marco previsto cuando se presentó abroquelada. Pero no le dejó demasiado margen de crítica -salvo los proyectos polémicos- a la hora de analizar el discurso: "vacío", "agotado", "repetido", ensayaron algunos a la hora de analizar los dichos del gobernante, pero detrás de eso, tampoco había propuestas serias para salir a retrucarlo.
Hubo un cambio de actitud de la oposición, sin lugar a dudas, preparándose quizá, por si fueran cierto los anuncios de un pariente político que asegura que "el tío Durazno tiene ganas de irse y si le prometen que no habrá persecusiones por sus bienes, les firma ya el retiro". El tio Durazno no volvió a referirse a que este será su último mandato, y que ni él ni su hermano volverían a ser gobernadores de San Luis, pero si hace honor a su palabra, en 2011 el primer mandatario no debería ser ninguno de los ARS.
Pero en ese cambio de actitud, la oposición también quedó entrampada "en la foto", como ocurrió hace poco más de un año, donde los recibió, posó para la foto y después, de los puntos presentados, solo cumplió con el más irrelevante de los temas.
Rodríguez Saá quiere mejorar su imagen hacia afuera y en eso estuvo trabajando, más allá de haber comenzado a esculpirse en el bronce para las generaciones venideras. Y la oposición le puso el marco adecuado. Pero allí también hubo algunos pequeños ganadores, al menos para la eterna pelea interna.
Daniel Pérsico se sentó en un sitial preferencial, a pesar de haber defeccionado a último momento y haber dejado sin candidato a gobernador a la oposición. Al lado estaba Walter Ceballos, que en la pelea por los puestos, a partir de un partido casi inexistente, logró aumentar la presencia en la Legislatura con un diputado más y llevar el primer hombre al Concejo capitalino. Ceballos estaba en la primera fila, a pesar de la renuncia de un radical crítico que dijo que se iba porque quería seguir siendo radical y que, anteriormente, al hacerse una de las tantas denuncias mediáticas en contra de la administración Rodríguez Saá, el díscolo dijo que seguían "bailando los mismos pasos de comedia" al son de la música del oficialismo.
Apenas algo más atrás, había otro radical que quiere transformarse en referente. A duras penas, pero ganador al fin, Sergio Guardia consiguió su lugar dejando sin silla a algunos funcionarios del oficialismo que debieron ver la apertura desde la barra de los simpatizantes.
Alfonso Vergés podrá ahora argumentar que él es la única oposición, ya que no fue a avalar con su presencia el discurso de Rodríguez Saá, pero debe estar demasiado ocupado con la avalancha de juicios que le inició y le iniciará Alicia Lemme, para hacerlo desaparecer de la faz de la arena política.
Aunque ya nadie ubica en los lugares que solía concurrir al verborrágico intendente que se mofaba de la dificultad de Lemme para expresarse y se reía de su incipiente tartamudez al hablar de sus proyectos. Quizá esté siguiendo el expendiente en Buenos Aires sobre su denuncia de fraude. O buscando un buen abogado para salir del atolladero.
Ninguno de los nombrados, a pesar de haber conseguido asiento en primera fila y mantenerse en los lugares centrales, parece haber sido ganador. A lo sumo lograron un empate o un descanso en el medio de la lucha.
Pero, sin que se note, detrás de ellos, con un trabajo silencioso, se notó la mano de un hombre que viene sumando de uno y otro lado. El mismo que pergeñó la primera reunión de los diputados, parece que fue una pieza clave para que la presencia del Frente Juntos por San Luis se concretara en el recinto.
Quizá sea él quien los siente a la mesa del diálogo para lograr la reforma que Rodríguez Saá pretende, aunque queden en el camino aquellas otras que vienen reclamando hace tiempo.
Desde arriba, sólo cubierto por su soñada pirámide de cristal, piedra y acero, con la visión del faraón, Rodríguez Saá mira como se acomodan las piezas y espera la próxima jugada.
Informe: Gustavo Senngustavosenn@argentina.com
http://www.periodistasenlared.com.ar/abril08-03/nota8.html
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