jueves, 10 de febrero de 2005

CUMBRE EN MAR DEL PLATA : MENU PERONISTA...




Encuentro Menem Rodríguez Saá
Discursos acomodaticios, pero en el fondo lo mismo

San Luis (Pelr) 14-02-05.
Al gobierno nacional "solo lo mantiene la soja y un poco de suerte" se encargó de desafiar Carlos Saúl Primero de Anillaco, que volvió a utilizar el pedido de elecciones internas en su partido para consolidar su acuerdo político con el otro caudillo feudal que tiene el país, Adolfo Segundo de Puntania.
Adolfo Rodriguez Saá pidió que no hagan "oidos sordos" al pedido de internas, pero el viernes último en Mar del Plata, se preocupó más en atacar a Nestor Kirchner que a formular nuevas propuestas.
"En cualquier sistema democrático aseguró el hombre de la sonrisa eterna, la vida de los partidos políticos es la clave de la democracia”, aunque también debería serlo la alternancia en el gobierno y la división de los poderes republicanos, cosa que en su tierra no dio el mejor ejemplo y los subyugó bajo su férrea mano mientras fue gobernador y los transmitió -casi hereditariamente- cuando traspasó el sillón a su hermano Alberto. Democracia para el PJ nacional, verticalismo en el de San Luis.
“Les pedimos que no se hagan los sordos, el movimiento justicialista está en acefalía y nosotros queremos que el pueblo peronista de toda la Argentina, en elecciones libres y transparentes, elijan la conducción. Y vamos a ver cuál es el rumbo del peronismo del futuro”, dijo el hombre fuerte de San Luis. “Hemos resuelto dirigirle una carta a los compañeros gobernadores, que se la vamos a remitir la semana que viene y que será una amplia convocatoria para que todos los peronistas nos unamos”, aseguró.
Como si la privatización de la energía eléctrica, la salud pública, la telefonía no hubiese sido obra de ambos, cada uno en su ámbito y en su tiempo, retomaron el discurso peronista y volvieron a desempolvar las banderas del 17 de octubre y la imagen de Perón y Eva Perón. “El país -afirmó- cuando estaba en la más grande decadencia, tuvo un 17 de octubre, donde el pueblo argentino y su líder empezaron la más grande transformación del siglo veinte".
Ninguno se acordó de "los que se quedaron en el 45", como sabía denostar Ménem a sus rivales cuando le reclamaban por la política contraria al peronismo estatista y distribuidor de las riquezas de aquellos años. Buenos discipulos de Hayek, uno de los padres del neoliberalismo, ambos crearon "un ejército de desocupados" que pululan en gran parte del país o se esconden tras una realidad de "pico y pala".
“Tuvimos hasta ahora sólo suerte y soja”, dijo Ménem, “pero esto -remarcó- no va a ser para toda la vida”, dejando tácito un mensaje de malos presagios a futuro, de los que habrá que estar precavidos, por su fama de mufa consagrado.
“Mientras la Argentina procura conformar un eje con Venezuela y Cuba, lo que en realidad necesitamos es alinearnos con las grandes potencias del mundo”, dijo el hombre de las relaciones carnales con los EEUU, que en poco se diferencia con el caudillo puntano, aunque desde San Luis procuren despegarse de la imagen del anciano político.
Gustavo Senn

http://www.periodistasenlared.com.ar/Archivo/febrero2005/feb05-14/nota1.htm